El libro fue escrito en 1845 por Dr. Heinrich Hoffmann, en él se narran historias de niños que se portan mal, y muestran las consecuencias que hay por su mal comportamiento. Las historias buscan enseñar a los niños distintas cosas como: no chuparse el dedo, no jugar con fuego, y que deben de comer la sopa, entre otras. El libro está escrito en verso rimado.
En Alemania incluso existe un museo que se llama tal y como se llama el libro :) Definitivamente lo iré a visitar. Les comparto el link de su sitio web: Struwwelpeter-Museum
-- PARENTESIS PERSONAL --
Éste libro me hizo recordar algunos relatos de mis padres, y muchas otras historias que otros padres contaban a sus hijos; y estoy segura de tu también podrás recordar algunas historias similares que alguna vez tus padres te contaron. Con éste libro vinieron a mi mente historias similares, no escritas en los libros, que han pasado de generación en generación... como la del niño que saco el brazo cuando iba en el carro y se quedó sin brazo, recordé a la niña que lloró tanto que se le cayeron los ojos, o que tal la historia del señor que no tenía mano por que la metió en la licuadora, yo sé que suenan muy trágicas éstas historias, pero así es como muchos de nosotros aprendimos a no hacer ciertas cosas... así se educaba... y me atrevería a decir que aún se educa así en muchos casos.
-- TERMINA PARENTESIS PERSONAL --
Lo interesante del libro son las historias y los dibujos, que podrían ser calificados como sádicos o traumáticos... como sabemos, actualmente muchos de los libros y las películas basadas en libros clásicos han sido adaptados y modificados para hacerlos "adecuados", podemos ver una versión de cenicienta en el cine, y al leer el libro es evidente que algunas partes de la historia (como la mutilación de los talones de las hermanastras) desaparecen. Leer el cuento de Caperucita Roja para algunas mamás puede ser violento. Yo prefiero leer a los niños las versiones clásicas.
Enseguida les comparto algunas imágenes e historias del libro DER STRUWWELPETER
La historia de la niña que jugó con fuego, se quemó y quedó hecha cenizas.
El niño que se chupaba el dedo, entonces vino el señor de las tijeras y se lo cortó, el niño se quedó sin dedo.
El niño que no se quería comer la sopa, pasaron los días, se fue haciendo más y más delgado hasta que se murió.
¿Qué historias no escritas similares te contaron o conoces? Deja tus comentarios :)
¡Saludos y escribo pronto!
Delia Melenas :)
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